En un gran número de industrias se requiere del aire comprimido para desarrollar distintas actividades, como pintar o inflar algún elemento indispensable para el proceso productivo de distintos bienes y servicios; la herramienta predilecta para desarrollar esta actividad es el compresor de aire, como un equipo que permite, mediante un proceso de absorción, almacenar y presionar el gas para luego ser expulsado de manera controlada a través de una manguera.
La innovación de estos aparatos ocurrió aproximadamente a mediados del siglo XIX, durante el auge de la revolución industrial y el afán de optimizar los procesos productivos de las distintas fábricas en el mundo; desde entonces, el estudio alrededor del aire comprimido ha permitido encontrar nuevas técnicas de funcionamiento y de mantenimiento del compresor de tornillo lubricado, uno de los modelos más recientes e innovadores que ha traído la investigación. Esta diversidad trajo muchas opciones en el mercado pero también varias dudas en los usuarios que no comprenden muy bien como estos aparatos funcionan con tanta efectividad.
Ante este desconocimiento ha sido muy complicado para varias personas comprender cómo se desarrolla las reparaciones de los compresores de aire en Monterrey; por ese motivo, desde HEFSA hemos decidido publicar este artículo en el que le mostraremos de la manera más sencilla posible el funcionamiento completo de estas máquinas y todos los detalles que debe conocer para optimizar su rendimiento y agendar con más exactitud los mantenimientos preventivos.
Principios básicos
Los compresores de tornillo Monterrey tienen un funcionamiento basado en el desplazamiento positivo, es decir, que poseen una cavidad abierta por la cual es absorbido el aire de la atmósfera cercana y es transportado por canales cada vez más pequeños que logran comprimir las moléculas hasta almacenarlas en un gran tanque desde el cual se podrá aprovechar la presión conseguida. En general es la innovación más destacada de la línea del tiempo de esta maquinaria, ya que resulta más eficiente que sus antecesores alternativos y de pistón.
En particular, el proceso de tornillo es continuo y hace el proceso de aspiración y compresión en una única fase repetitiva, a diferencia del pistón que debe elevarse para absorber y luego descender para realizar la compresión del aire, algo que requiere de más energía, tiempo, tiene más propensión a diferentes tipos de fallas y no genera un flujo de aire continúo sino que en intervalos con diferentes flujos que afecta la calidad final del gas.
Este modelo está formado por dos rotores situados en paralelo que recuerdan a las espirales de un tornillo, los cuales giran en paralelo y hacía direcciones contrarias, encajando entre sí y generando una fricción que provoca la aspiración y compresión del aire cercano a la máquina. Este diseño, a pesar de ser algo innovador en el mundo de los compresores fue formulado hace milenios por Arquímedes que consiste, básicamente en una espiral montada sobre un cilindro que gira sobre sí mismo.
¿Cuáles son los componentes básicos de estas herramientas?
En el mercado existen muchas variaciones de este modelo, pero de manera básica todos tienen los siguientes componentes. Comprender el funcionamiento de estas piezas es fundamental para realizar un adecuado mantenimiento del compresor de tornillo.
- Rotores: se trata de los tornillos que absorben y comprimen el aire; estas piezas, al funcionar mediante la fricción requieren de aceite para lubricar y así no desgastarse y funcionar de manera óptima.
- Motor de acción principal: básicamente es el conjunto de piezas que generan la chispa que pone en funcionamiento la maquinaria; habitualmente es de tipo eléctrico.
- Sistema de regulación: se trata de un elemento que permite o interrumpe el paso de aire por el sistema de tornillos en función de si ya se alcanzó la presión recomendada o no.
- Sistema de filtros de lubricación: para asegurar que el aceite que lubrica los tornillos estará en óptimas condiciones por mucho tiempo se realiza un sistema de filtrado en el que se erradican las impurezas que impiden el funcionamiento óptimo del equipo.
- Filtros de aire: el aire de la atmósfera contiene muchas partículas contaminantes que fácilmente ingresarán al sistema y podrían interrumpir su funcionamiento, por eso es necesario filtrar antes de comprimirlo.
- Sistema de refrigeración de lubricante: mantiene el lubricante en una temperatura apropiada para evitar que se queme y dañe los demás componentes.
- Enfriamiento del aire: si el aire se calienta tendrá más presión de la recomendada e impedirá un aprovechamiento óptimo.
Con el tiempo estas piezas comenzarán a desgastarse o empeorar su funcionamiento, por ello es fundamental agendar citas de mantenimiento del compresor de tornillo con los profesionales de HEFSA que, periódicamente, revisarán los aparatos para limpiarlos, cambiar las piezas que desgastadas, limpiar los filtros y en general impedir que este equipo se deteriore y no ofrezca todas las prestaciones de las que cientos de industrias se benefician día tras día.
Si desea agendar un encuentro o cotizar nuestros servicios, lo invitamos a que se contacte a los números (81) 8351 2945 y (81) 8351 9423 o escriba su solicitud al correo ventas@equiposherramientasymas.com.